Munchies conscientes: Celebración del consumo responsable de cannabis en el Día Internacional de Concienciación sobre las Sobredosis

Cuando llega el 31 de agosto, el mundo se reúne para celebrar el Día Internacional de Concienciación sobre las Sobredosis: un día dedicado a recordar las vidas perdidas y a concienciar sobre los peligros reales del consumo de drogas. Pero no te preocupes, éste no va a ser uno de esos artículos catastrofistas. En lugar de eso, estamos aquí para hablar de cómo el cannabis, cuando se disfruta de forma responsable, puede ser realmente una parte beneficiosa de tu vida. Así que, coge tu variedad favorita (si es lo tuyo) y vamos a sumergirnos en lo que debes y no debes hacer para mantener la calma con el cannabis.

Cannabis 101: un repaso amistoso

Lo primero es lo primero: aclaremos las cosas. El cannabis no es como las demás sustancias que suele destacar el Día Internacional de Concienciación sobre las Sobredosis. A diferencia de los opioides, que han sido el centro de una trágica epidemia, no se sabe que el cannabis cause sobredosis mortales. Es mucho más probable que acabes viendo una serie que ya has visto cinco veces que haciendo un peligroso viaje a urgencias. Sin embargo, eso no significa que debas ir a por todas y convertirte en una máquina de humo humana. Incluso con el cannabis, la moderación es la clave.

Las reglas de oro del consumo de cannabis

  1. Poco a poco, como una barbacoa: Igual que no te zambullirías en un plato de alitas de pimiento fantasma sin un vaso de leche cerca, no deberías zambullirte en lo más profundo de los productos con alto contenido en THC de inmediato. Empieza con una dosis baja y espera antes de decidir si necesitas más. Créenos, tu futuro yo te lo agradecerá.
  2. Conoce tu hierba: Tanto si te gustan los cogollos, los brownies o el hachís de burbujas, conoce lo que te estás metiendo en el cuerpo. ¿Esa pequeña etiqueta con los porcentajes de THC y CBD? No está ahí sólo de adorno: es tu mejor amiga para asegurarte de que obtienes la experiencia que buscas, sin desvíos inesperados.
  3. Ambientación y entorno: no, no es un bufete de abogados: El ambiente que te rodea influye mucho en tu experiencia con el cannabis. Asegúrate de estar en un lugar cómodo donde puedas relajarte, ya sea tu sillón favorito de casa o un lugar de picnic. Al fin y al cabo, el ambiente no es sólo para los restaurantes elegantes.
  4. Mixología 101: Cuidado con el alcohol y las pastillas: El cannabis puede parecer el alma de la fiesta, pero no siempre combina bien con otras sustancias, sobre todo con el alcohol y ciertos medicamentos. Mezclar sustancias puede provocar efectos inesperados, así que es mejor simplificar las cosas y limitarse a una cosa buena cada vez.
  5. Adulto 101: ¿Recuerdas aquella vez que intentaste cocinar drogado y casi quemas la cocina? Sí, no lo hagas. Lo mismo vale para conducir o manejar cualquier maquinaria. El cannabis es estupendo para desconectar, pero no es tu copiloto.

El cannabis como héroe, no como villano

Aquí es donde el cannabis brilla de verdad: en algunos casos, puede ayudar a alejar a la gente de sustancias más peligrosas. Los estudios sugieren que el acceso al cannabis podría reducir el consumo de opiáceos nocivos, ofreciendo a la gente una forma más segura de controlar el dolor y el estrés. Así pues, si se utiliza de forma responsable, el cannabis podría formar parte de la solución en la lucha más amplia contra el consumo indebido de drogas.

Para terminar:La manera más relajada

Así que, mientras nos tomamos un momento el 31 de agosto para pensar en la importancia de la seguridad y la concienciación, recordemos también que el cannabis puede ser una parte positiva de nuestras vidas, si lo utilizamos con prudencia. Piensa en él como el ingrediente perfecto en la receta de la vida: una pizca aquí y allá puede añadir sabor, pero demasiado puede estropear el plato. Así pues, que sea ligero, informado y, lo que es más importante, divertido.